Si, estoy hablando de Kaeri Tedla.
Le estoy profundamente agradecida desde esos tiempos y aún más ahora, por todo aquello que a través del aire de esa estación, conocí y aprendí con su sabia conducción. No tengo palabras para decir cuánto cariño le tengo.
Mis mejores deseos como siempre, y felices treinta y… no lo voy a decir.
Aún extraño las noches de chill out room, de Afrique y sus chistes más malos que los de mi abuela. Aún extraño saber que hay alguien del otro lado del micrófono que sabe más que yo, y me puede meter un par de jalones de orejas cuando me equivoco.
Gracias, solamente eso puedo decir.


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